La descarga electroestática (ESD) es la descarga repentina de electricidad estática a tierra. Los componentes sensibles, como las unidades de disco duro o las unidades de estado sólido de ordenadores portátiles o de escritorio, pueden dañarse si están en la ruta de la corriente al producirse una descarga. Se deben tomar precauciones especiales en todo momento al manipular cualquier dispositivo que pueda sufrir daños debido a la electricidad estática.
Los daños por ESD se producen cuando la carga de una mano o herramienta encuentra un camino de menor resistencia para llegar a la unidad. La unidad podría sufrir daños si, en el flujo de corriente hacia la unidad, la cantidad máxima de energía que son capaces de disipar sus componentes es inferior a la energía de la carga. En una unidad de disco duro de ordenador de escritorio o portátil, se podrían destruir los pequeños trazados de metal, similares a una lámina, de la placa de circuitos, ya que están diseñados para soportar pequeñas cantidades de tensión. Si el daño solo es parcial, la señal que recorre la trayectoria podría sufrir intermitencias, lo que causaría la degradación de la señal.